Patatas al ajillo pastor

Jaén capital, es una de las ciudades más antiguas de España y hasta el año 1246 que fue conquistada por Fernando III el santo, era una de las ciudades más importante de Europa, debe su nombre al topónimo Geen (ruta de caravanas).
Está situada en un promontorio, de ahí las empinadas calles de su ciudad, de empinadas pendientes.
La provincia de Jaén es conocida mundial mente por sus grandes extensiones de olivares y su abundante producción de oro líquido, debe ser por tradición histórica ya que en tiempos cartagineses, antes de la llegada de los romanos, le dieron el nombre de "Auringis", por los yacimientos de oro encontrados de los que se conserva algún vestigio.
Jaén es tierra de buenas carnes y buenas rectas, son típicas las comidas de pastores como la receta que os propongo, es una receta para guarnición no como plato principal, pero por su bondad y sencillez he creído oportuno proponeros la.

Ingredientes para 4 raciones:

• 8 patatas grandes
• 1 cabeza de ajos
• 1 cuchara de café de comino en grano
• 1 cucharada generosa de pimentón dulce
• 1 vaso de vino blanco
• 1 cucharada de vinagre
• Sal 

Elaboración:

Se pelan las patas y se cortan en panadera (rodajas de 1 cm. aprox.), se fríen en abundante aceite en una sartén de hierro, hasta que estén un poco doradas.

Cuando están fritas retiramos aceite sobrante y reservamos.

En un mortero majamos los ajos pelados y el comino y el pimentón. A continuación añadimos el vinagre y el vaso de vino, diluimos bien. Añadimos esta vinagreta a las patatas, ponemos al fuego nuevamente durante 4 minutos y movemos para que no se pequen.

Acompañar una buena carne de caza y el resultado veréis que es muy sabroso.

Buen provecho.